¿Qué es la lactosa y cómo sé si tengo intolerancia a la lactosa?
La lactosa es una azúcar que está presente en la leche de los mamíferos.
Si una persona presenta síntomas digestivos como hinchazón o distensión abdominal, diarrea y gases después de consumir alimentos o bebidas que contienen lactosa, puede que tenga intolerancia a la lactosa.
La intolerancia a la lactosa puede afectar la salud si impide que una persona obtenga suficientes nutrientes, como calcio y vitamina D, que están presentes en abundancia en productos lácteos.
¿Qué causa esta intolerancia?
La maldigestión de la lactosa ocurre cerca de un 25 por ciento de la población en los Estados Unidos y 75 por ciento en la población mundial.
Con excepción de un trastorno hereditario donde los bebés nacen sin la enzima llamada lactasa, la intolerancia a la lactosa se desarrolla por la malabsorción del carbohidrato lactosa es decir, la digestión incompleta de la lactosa en la leche debido a los bajos niveles de la enzima intestinal.
La lactasa es necesaria para digerir la lactosa en el intestino delgado. Si la lactosa está mal digerida entonces entra al intestino grueso, donde es fermentado por bacterias del colon, y produce ácidos y gases llamados hidrógenos, metano y dióxido de carbono, por eso estas personas tienen hinchazón, gas y cambios de evacuación intestinal.
- Más allá de no tener la enzima lactasa, la intolerancia a la lactosa puede ser secundaria a otras patologías, como el síndrome del colon irritado, cirugías que obstruyen el sistema digestivo e incluso algunos medicamentos. La digestión de este carbohidrato mejora cuando la causa de la intolerancia es corregida.
Diagnóstico
Para diagnosticar la intolerancia a la lactosa, el médico le preguntará al paciente sobre sus síntomas, su historia clínica, familiar y sus hábitos alimenticios, además puede realizar un examen físico y pruebas de aliento de lactulosa para ayudar al diagnóstico de la intolerancia a la lactosa.
Terapia nutricional
Se debe hablar con el médico o dietista sobre cómo cambiar la dieta para ayudar a controlar los síntomas de intolerancia a la lactosa y asegurar que se están obteniendo suficientes nutrientes. Es posible que una persona deba reducir la cantidad de lactosa que consume. La mayoría de las personas con intolerancia a la lactosa pueden consumir un poco de lactosa sin tener síntomas.
Aquí hay 2 estrategias para incluir la leche y otros lácteos en la alimentación sin desarrollar síntomas:
- Inicialmente, consume pequeñas porciones de comidas con lactosa como la leche (½ taza). Gradualmente incrementa el consumo hasta que empiezan a aparecer los síntomas. Esto te ayudará a saber cuánto puedes tolerar.
- Ajusta el tipo de lactosa que consumes – en vez de leche cambia a yogurt o queso duro por que son mas fermentados. Generalmente, mientras más fermentado el producto, menos lactosa tiene.
Otros productos que pueden ser sustitutos y naturalmente no tienen lactosa son:
- Leche de almendras
- Yogurt de coco o soya
- Quesos veganos (como la marca GoVeggie)